Hacer ejercicio, practicar deportes y mantenerse activo es una excelente forma de cuidar nuestra salud y mejorar nuestro bienestar físico y mental. Existen pruebas sólidas de que la actividad física mejora la salud y ayuda a prevenir o aliviar diversas enfermedades. Adaptado a nuestra edad, cualquiera puede incorporar este hábito saludable a su rutina, ya sea comenzando por primera vez o retomando después de un período sin actividad.
incluyen a la practica de actividad física, una alimentación saludable y evitar el consumo de alcohol y tabaco. Si vas a modificar tus rutinas diarias e incorporar ejercicio, es recomendable elegir una actividad que disfrutes y que sea apropiada para tu estado físico.
Comienza con ejercicios de baja intensidad y aumenta gradualmente el volumen y, posteriormente, la intensidad. Evita actividades excesivamente exigentes. Monitorear tus avances te mantendrá motivado.
Uno de los ejercicios que se recomienda al empezar seria caminar. Caminar es una excelente opción para la mayoría de las personas. Se sugiere comenzar a un ritmo que te permita mantener una conversación mientras caminas. Es más agradable y ameno hacerlo en compañía.
